Confía plena mente
en el Señor y no te fíes de tu inteligencia. Cuenta con él en todos tus caminos
y él dirigirá tus senderos. No presumas de sabio, respeta al Señor y evita el
mal; ¡esa es la mejor medicina para fortalecer tu cuerpo. (Proverbios 3: 5-8)
Cada vez mas, la medicina esta tomando al individuo
como un todo y comprendiendo que la mente y el cuerpo no son cosas separadas
sino que forman una unidad.
Hoy los científicos reconocen a las enferme-dades
psicosomáticas, como aquellas que tienen un origen en un conflicto psicológico
que se expresa a través de un síntoma físico. Señalan que las emociones y los
sentimientos negativos que no se pueden exteriorizar, se manifestarán
orgánicamente.
Si realmente se considera al ser humano como un
todo: ¿Qué hay de nuestro espíritu? ¿Qué decir de nuestra identidad espiritual?
¿Por qué aún no se tiene en cuenta a la hora de considerar nuestra salud
física?
¡Confiar plena mente
en el Señor, no fiarnos de nuestra inteligencia, contar con él en todos
nuestros caminos, no presumirnos de sabios, respetarlo y evitar el mal, es la
mejor medicina para fortalecer nuestro cuerpo!.
¿Estás
cuidando tu salud?
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